lunes, 19 de julio de 2010

DONDE HAY MÚSICA, NO MORA EL MAL


"Te quiero, eres perfecto... ya te cambiaré". De Joe Dipietro y Jimmy Roberts. Dirección musical: Manuel Gas. Dirección escénica: Esteve Ferrer. Traducción y adaptación: Anna Ullibarri y Roser Batalla. Reparto: Silvia Marsó, Miguel del Arco, Carmen Conesa, Víctor Ullate. Músicos: Mónica Fuentefría. Lázaro Pulido Cruz. Anau Vilá. Escenografía: Carlos Montesinos. Vestuario: Antonio Belart. Iluminación: I. Morros y F. Ayuste. Madrid. Teatro Marquina. 1-9-2000.

El género musical ha despertado siempre la simpatía y el aprecio del público, porque la música ayuda a soportar la vida. "Donde hay música, no mora el mal", reza sabiamente un dicho popular. El espectáculo "Te quiero, eres perfecto..." es una magnífica oportunidad para volver a disfrutar de las livianas bondades del teatro musical. El secreto del encanto de esta representación, radica en la equilibrada mezcla de ingredientes que requiere el género. Un libreto que no pesa demasiado en pretensiones críticas y trascendentes; una música agradable, que da la sensación de haberla oído ya en muchas ocasiones; pero, que sumada a la juventud, humor y encanto de sus protagonistas se convierte en un apetitoso banquete escénico que agradecerá el público.
Este musical de Joe Dipietro y Jimmy Roberts, estrenado originariamente en Nueva York, con producción de James Hammernstein, (uno de los principales bastiones del poderoso mundo del espectáculo musical anglosajón), pone en evidencia lo similares que son los conflictos que sufren los habitantes de las grandes urbes contemporáneas: los agobios laborales, las relaciones familiares entre esposos, padres e hijos; las dificultades de la vida urbana actual, con una lista interminable de obligaciones públicas añadidas, indeseables por cualquiera de estos acosados y agotados ciudadanos de casi el S. XXI. Aunque, el tema central que guía todas las historietas que se representan a lo largo de la obra, es la búsqueda del amor, de la pareja, del consuelo vital y sexual que produce la compañía amada. La huida de la soledad es lo que desea cualquier humano viviente, mucho más en las duras ciudades de acero implacable que nos aíslan tras los muros de nuestros coches o nuestras casas.
Por eso, espectáculos como éstos ayudan a ir al teatro, porque el público pasará un par de horas estupendas con estos cuatro eficaces cómicos; y los tres virtuosos músicos que en escena les acompañan. Carmen Conesa vuelve a demostrar su gran empatía con el público; es todo un animal de las tablas: disfruta, se emociona, hace la gansa, y lleva sobre sus hombros gran parte de la vitalidad del espectáculo. Las brillantes dotes vocales y actorales de Miguel del Arco, la secundan en su empeño, afrontando con ella numerosísimos y eficaces cambios de personajes. Silvia Marsó y Víctor Ullate Jr. completan este eficaz y alegre cuarteto, lleno de gracia, ternura y belleza. El público aplaudió a rabiar algunos números musicales, como el del urinario de caballeros; la cena familiar; el monólogo del vídeo para una agencia matrimonial; el paseo familiar en coche; o la ceremonia de la boda, al final del primer acto.
"Te quiero, eres perfecto..." es un musical agridulce contra la soledad; todo lo que retrata con fresca ironía, es real; como la vida misma, de hoy en día. Cada generación de espectadores podrá verse reflejada en algún grupo de sus numerosos personajes protagonistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario